Francisco Huichaqueo: "Alanis Obomsawin entregó mensajes de fe y paz al pueblo Mapuche"

Francisco Huichaqueo: "Alanis Obomsawin entregó mensajes de fe y paz"

Conferencias, charlas, visitas a territorio mapuche, una retrospectiva de su obra y un reconocimiento a su trayectoria fueron algunas de las diversas actividades que encabezó Alanis Obomsawin en su visita a Chile, que fue posibilitada gracias a la realización de la III Muestra de Primeras Naciones que anualmente se desarrolla paralelamente al Festival de Cine de Valdivia como parte de la programación de éste, auspiciada por la fundación Imagen de Chile.

En su tercera versión, la Muestra de Primeras Naciones, dirigido y organizado por el académico del Departamento de Artes Visuales, Francisco Huichaqueo, reflexiona sobre el encuentro de mundos y las posibilidades que nacen al momento del reconocimiento, a través de películas realizadas por cineastas de las primeras naciones.

Fue así como la participación de esta destacada documentalista, perteneciente a la nación Abenaki -pueblo amerindio de Quebec, Canadá- causó gran revuelo nacional y acaparó la atención de la prensa, debido a la importancia de esta directora líder en el cine nativo mundial, reconocida y galardonada en todo el orbe por su lucha en la reivindicación de los derechos de los pueblos indígenas.

“Alanis perteneció a una Escuela de Reserva en Canadá, donde capturaban a los niños y les enseñaban religión y a  hablar el idioma dominante, en este caso inglés, para olvidarse de la lengua nativa. Ella es una persona que viene de esa realidad y aunque en Canadá existen algunos avances en materia de reivindicación indígena, ella acá entregó un mensaje elocuente e inspirador para aquellos que están en la lucha por el respeto y por la paz de las personas que vivimos en este territorio llamado Chile; que es un territorio con varios pueblos o varias naciones, es un lugar plurinacional, aunque no sea definido así por las leyes chilenas”, recordó el profesor Francisco Huichaqueo.

En terreno

Es precisamente por esa lucha, que Alanis Obomsawin pidió a la organización del Festival, que dentro de su itinerario se programaran visitas a tierra mapuche, para conocer esta realidad.

El lof de Ranquilco, en Lanco, Región de Los Ríos, fue una de las zonas que visitó la cineasta, en donde recorrió la escuela, estuvo con los niños contando historias, durmió en la ruca de la familia Compayante Mariqueo, quienes fueron los que invitaron a Obomsawin y Huichaqueo, y además visitaron un cerro sagrado en donde “contamos nuestras historias, allá arriba en la montaña”, contó el académico.

Los jardines interculturales de la zona rural de Paillaco, también en la Región de Los Ríos, fueron parte de la vista de la documentalista, que según lo expresado por Francisco Huichaqueo, “vio un mundo mapuche en paz, aunque esto no sea así, ya que no pudimos ir a Ercilla, a Arauco, a Cañete o a Wente Wilkun Mapu,  que era nuestro primer plan, para que ella conociera las dos realidades. Pero no pudimos ir porque las comunidades se estaban preparando para la marcha del 12 de octubre y una de las comunidades que íbamos a visitar, Wente Wilcun Mapu, fue allanada la noche anterior y estaban algunos de los integrantes de la comunidad presos y otros prófugos. Ese era el escenario donde íbamos a llegar, es decir, íbamos a ir donde no había nadie, no iba a estar nuestra gente. Ella supo eso y pasamos ese 12 de octubre con esas noticias”, señaló el artista.

En ese contexto, el mensaje de la realizadora se tornó potente y tuvo una excelente llegada con el pueblo mapuche. Así lo recordó Huichaqueo al afirmar que, “la gente con sangre indígena se reconocen bien y ella fue reconocida como una gran madre desde el mundo mapuche. Esa fue mi percepción al menos. Alanis habló de respetarse, de quererse. Dio cifras claves de los procesos que han habido en su país. Las tasas de suicidios de los jóvenes indígenas, que son en masa; habló del alcoholismo; sobre los niños en las escuelas de reserva que son más de 6 mil. Pero también se refirió a cosas positivas, como por ejemplo, cuántos profesionales han salido ya en estas últimas generaciones: abogados, alcaldes, representantes en el Senado, como también en el mundo de las artes. Por ejemplo, el año pasado, una producción de directoras indígenas mujeres fue reconocida con un Oscar en Canadá. Entonces se instaló un tema para poder discutir y develó todo lo que nos falta trabajar a nosotros como mundos indígenas en Chile”.

La visita de Alanis Obomsawin a Valdivia, fue coronada con la entrega de la estatuilla del pudú de oro del Festival, que le fue entregada por una familia mapuche de la comuna de Lanco. “Del pueblo mapuche a la nación Abenaki. Fue un momento histórico y maravilloso el que nuestra gente le entregara este reconocimiento a ella y Alanis lo tomó con mucho respeto y agradecimiento siempre entregando un mensaje alentador, esperanzador”, reconoció Huichaqueo.

En Santiago

Como parte de las actividades que Alanis Obomsawin realizó en nuestro país, encabezó un encuentro en Santiago en el contexto de la exposición Wenu Pelón, de Francisco Huichaqueo, que por estos días se presenta en el Museo Arqueológico del MAVI.

Durante la charla, titulada Kiñe küme trawün Alanis Obomsawin Inchiñ -que en mapuzungun significa Encuentro especial con Alanis Obomsawin, Huichaqueo y la cineasta, conversaron sobre su obra y trayectoria como documentalista, la que ha sido reconocida en diversas partes del mundo y que le permitió el ingreso al Playback Canadian Film & Television Hall of Fame. Además se exhibió parte de su material fílmico, que tiene cintas como Hi-Ho Mistahey!, que muestra el escaso finaciamiento para la educación primaria en la comunidad aborigen de Attawapiskat. O Trick or Treaty?, última película de la cineasta que retrata a líderes indígenas en su búsqueda de justicia y en su intento de establecer un diálogo con el gobierno canadiense.

La realizadora de más de 49 películas, ha involucrado activamente el tema educacional, asistiendo a comunidades para intercambiar experiencias y saberes y a su vez realizando sus tres últimas películas en base a la temática específica de la enseñanza.

De esta forma el cine de Alanis Obomsawin demuestra que el tema indígena no solo es algo no resuelto en Chile, sino que también enseña que el enfrentarlo como país no pasa por la violencia, ni la militarización, ni los slogans populistas, sino por un diálogo franco en donde los derechos ancestrales son reconocidos y los despojos, reparados.

La forma de abordar estas temáticas en sus películas, la han hecho merecedora de diversos galardones a lo largo de su trayectoria. En marzo del 2001 recibe el Governor General’s Award in Visual and Media Arts. Sus reconocimientos incluyen el Premio a la Trayectoria en el Festival de Santa Fe, Premio Pionero de la Asociación Internacional de Documentales, Premio a la Dirección Sobresaliente en el Cine y la Televisión (TWIFT), el Canadian Native Arts Foundation National Aboriginal Achievement Award, y el Premio de la Asociación de Sociología y Antropología de Canadá (CSAA), entregado por primera vez en la historia a una persona que no proviene del ámbito de la academia.

Obomsawin también recibe una membresía de Ontario College of Art, es nombrada Doctor Honoraria de Letras (en New York University y Carleton University) y Doctor Honoraria en Leyes (en Concordia University, Montreal, y University of Western Ontario). Además, ha presidido el Consejo de Montreal para la Administración de la Vivienda de Mujeres Nativas y fue parte del Consejo Asesor de Primeras Naciones de Canadá. Como miembro de la Junta de Voces Aborígenes, fue parte de una iniciativa para obtener una licencia de radio para la organización. Miembro vitalicio de la Junta Directiva de la Red de Televisión de los Pueblos Aborígenes, Alanis es también miembro de la Junta Directiva de la Televisión Pública de Vermont y del National Geographic International.

Al ser consultado por la importancia que la obra de Obomsawin adquiere a nivel mundial, Francisco Huichaqueo reconoció que, “hay algo especial que hace ella y que tiene que ver en la forma como se conecta con la gente que protagoniza sus películas. Y lo que hace Alanis es contactar a la persona, la comunidad o autoridad y arma una relación profesional, pero también de amistad. Primero es una relación, después toma las cámaras. Entonces yo creo que la gran clave es que no está trabajando con personajes y no está haciendo periodismo, no está haciendo documental de guerra, está trabajando con personas y sus historias, que es distinto. Ahí ya la relación y el pacto de confianza y de cariño, es otro. Entonces la gente se entrega después de manera natural por eso sus obras tienen gran impacto”, dijo el artista y agregó, “Además es una persona muy estudiosa, que se prepara y sabe al dedillo el conflicto o el problema, y estudia mucho antes de comenzar la grabación. Se sabe todos los detalles, visualiza dónde podría aparecer un problema para que no suceda, porque sabe muy bien el tema. Por eso sus películas son lindas como piezas visuales, pero además son educativas y dirigidas a cualquier público”.

Para Alanis Obomsawin el cine es una herramienta fundamental en la lucha de los pueblos indígenas por la visibilidad. De allí que le comentara a Francisco Huichaqueo las ganas que tenía de realizar una película en territorio mapuche para el próximo año.

Finalmente, la directora líder en el cine nativo mundial antes de subirse al avión de vuelta a su país, le dijo a Huichaqueo que, “el amor más importante de una persona indígena es el amor hacia su pueblo”.

Últimas noticias