Luego de las gestiones realizadas por el artista visual, egresado del Departamento de Artes Visuales (DAV) de la Universidad de Chile, José Miguel Marty, en conjunto con la académica del Instituto de Artes Visuales y docente del Laboratorio de Gráfica y Grabado de la Universidad Austral de Valdivia, Claudia Monsalves, cuatro estudiantes del Taller Prácticas Artísticas en el Espacio Público en compañía del profesor Francisco Sanfuentes y del propio José Miguel Marty, viajaron hasta la capital de la región de Los Ríos para desarrollar una serie de actividades centradas en descubrir y repensar la ciudad.
Daniela Labra, Bastián Aguirre, Jocelyn Quiroz y Matilde Garcés junto a las alumnas de la Universidad Austral Annelis Fuentes, Camila Almendra, Carla Saldivia y Ana Casanova, recorrieron la ciudad para elaborar sus propias miradas sobre la calle y proyectar una serie de intervenciones en ella.
Así lo explicó la profesora Claudia Monsalves, quien estuvo a cargo de las actividades: “Durante una semana se desarrolló un taller de intervención urbana con la participación de estudiantes de ambas universidades. Se realizaron jornadas de trabajo que constaban de conversatorios, muestras de trabajos de cada grupo, recorridos por la ciudad y una jornada de cierre donde cada uno de los y las participantes expuso su proceso de intervención al resto del grupo abriendo un espacio de debate y reflexión”.
Según el profesor Francisco Sanfuentes –quien además de dirigir las actividades presentó los libros Poéticas de la Intemperie y la reedición Calle y Acontecimiento- este trabajo tuvo como pie forzado el repensar la ciudad, para “por un lado, provocar una relación más profunda, intima, a ratos crítica o experiencial con el espacio que se habita. En el entendido que a menudo quien habita un lugar lo usa en términos prácticos cotidianos de desplazamiento. Por eso se trataba de propiciar un tiempo para remirar, repensar y redescubrir la propia ciudad de una manera amplia y libre. Además para los estudiantes de la Universidad de Chile se trata de enfrentarse, en casi todos los casos, a un territorio inédito para ellos, donde las calles se abrían como espacio de incertidumbre y pura posibilidad”, indicó.
Sobre las intervenciones
Así surgieron variadas propuestas centradas en elementos propios de la zona como el terremoto de 1960, los torreones españoles que se levantan en medio de la ciudad y la estación de trenes.
JocelynQuiroz, por ejemplo, ante la persistencia de la sensación de lo que había ocurrido ahí, se dedicó a investigar y recopilar información sobre el terremoto y maremoto que afectó a Valdivia en 1960 y realizó una especie de memoria de ese desastre natural. “Para mí el realizar prácticas artísticas en la ciudad tiene un valor político porque de ese modo ella realmente es habitada en contraposición de la planificación que se le tiene; hecha en función de un sistema económico alienante y deshumanizado”, dijo Quiroz al referirse a su experiencia de trabajo en Valdivia.
La alumna agregó que, “este viaje fue significativo porque allí se generaron varias instancias que difícilmente ocurrirían en Santiago, con la rutina de clases, trabajos, etc. y que me nutrieron con nuevas miradas y experiencias. Pienso que el viajar con el curso a otro lugar para realizar un trabajo, genera un espacio propicio para el intercambio de ideas, de reflexiones que permiten que cada integrante y el ramo mismo sean nutridos, permitiendo encontrar nuevos modos de hacer y de ver”.
Matilde Garcés junto a Daniela Labra trabajaron con el sonido que producía el viento al interior de un galpón abandonado en donde yacía un ferrocarril. Así, la nostalgia, la desaparición, el tiempo y las despedidas fueron los ejes del ejercicio de intervención. “Con esta actividad logramos buenas cosas; por un lado pudimos trabajar juntos como taller, ayudarnos y realmente centrarnos toda la semana en la actividad. También significó de cierta forma un desafío, ya que no conocíamos la ciudad y tuvimos que realizar el ejercicio de recorrer e intervenir de alguna forma ese nuevo lugar en la semana”, manifestó Matilde Garcés al referirse a la actividad.
Por su parte Bastián Aguirre intervino uno de los torreones de la ciudad, cercanos al río Calle-Calle, colocándole luces led al monumento, así como también a algunas puertas abandonadas que hay en sus alrededores.
José Miguel Marty, que trabaja con fibras vegetales, utilizó sustancias propias de la zona para fabricar elementos con fibras, los que fueron instalados en distintos lugares. “Valdivia es una ciudad encantadora. El recorrer la ciudad en la lógica de intervenir el espacio público abrió otros caminos de los ya recorridos en las muchas ocasiones que he estado en dicha ciudad. Es un buen ejercicio el someter al arte a la crudeza de la calle, existe una falta de control en los gestos que uno pueda realizar en la calle, que lleva a optimizar los recursos con los cuales uno trabaja para intentar hacer una mella al espeso cotidiano del espacio público”, afirmó el artista.
Coincidente opinión tiene la profesora Claudia Monsalves, para quien, fue y aún sigue siendo una experiencia relevante. “El intercambio académico y estudiantil es vital. Conocer otras dimensiones de la experiencia, otros modos de hacer, otras visiones, abrió en este caso nuevas perspectivas sobre la ciudad. Esta ciudad que para quienes la habitamos a diario a veces se vuelve invisible en su cotidianidad”, indicó y agrega, “puedo decir que hay un antes y un después en relación a ciertos imaginarios de la ciudad de Valdivia. Además se conformó un grupo bastante diverso que seguirá trabajando, desde sus propios espacios y a su vez conectado con el fin de proyectar un próximo encuentro”.
El convenio entre universidades
Cabe destacar que esta actividad fue posibilitada gracias al proyecto de elaboración de un convenio entre el Departamento de Artes Visuales de la Universidad de Chile y el Instituto de Artes Visuales de la Universidad Austral de Chile, que posibilitará el desarrollo de movilidad tanto académica como estudiantil, para la investigación y creación de forma colaborativa.
Respecto a esta nueva alianza entre ambos espacios universitarios, la académica Claudia Monsalves recalcó que, “me parece muy importante la construcción de redes de cooperación entre estas dos universidades. Por nuestra parte, desde el núcleo Paisaje, Territorio y Espacio conformado por académicas y académicos del Instituto de Artes Visuales, tenemos una línea de trabajo en común con lo que realiza el profesor Sanfuentes en esa área, tomado como base que las artes en una universidad son en sí mismas, un vínculo con la ciudad y sus habitantes, sobre todo si se piensan y trabajan con y en el espacio público”, dijo y agregó, “al trabajar en el espacio de la calle como soporte y a la vez como materialidad posible, entramos en un campo de confluencia con todo lo que allí sucede”.
Para el profesor Francisco Sanfuentes, la unión de ambas casas de estudio “da pie a un vínculo más profundo, con proyecciones de exposición tanto en Santiago como en Valdivia. Trabajo de intercambio de académicos que vinculen la actividad del Núcleo de Creación e Investigación de Arte y Espacio Público de la Universidad de Chile con su símil de Valdivia, tanto a nivel de profesores como de estudiantes, pues aquí no hay diferencia entre ambos estamentos, ya que se trata de la misma inquietud y deseo de proyectar nuestras acciones, desarrollar el conocimiento más allá de los espacios institucionales del arte, entender la mirada que se abre a las calles como forma privilegiada de conocimiento” indicó.
Finalmente ambos académicos coincidieron en afirmar que para este 2016 se implementaran convenios marcos para poder realizar movilidad académica de estudiantes y profesores, lo que permitiría la realización de una exposición de los estudiantes de la Universidad Austral en la Sala Juan Egenau y de los estudiantes del DAV en la Galería Replica, perteneciente a la universidad del sur.