Más de 200 piezas conforman la colección de religiosidad popular del Museo de Arte Popular Americano Tomás Lago, MAPA, “objetos que van desde la pintura popular expresada en exvotos y otros formatos, pasando por la talla de imaginería popular, hasta imágenes de devoción insertas en soportes poco convencionales como botellas de vidrio”, explica Felipe Quijada, encargado de Documentación e Investigación del MAPA.
Parte de ese patrimonio es el que se exhibirá en la muestra Religiosidad Popular con que el MAPA dará inicio a su programación 2018, transformando “cada vitrina en un mundo, una poesía, una poética”, comenta Nury González, artista visual y directora del Museo.
“Una de las vitrinas reúne máscaras peruanas, bolivianas y guatemaltecas, así como algunas representaciones de bailes de fiestas religiosas, como diabladas y morenadas. Luego la muestra se organiza en torno a santos y pesebres, que son representaciones más cercanas al catolicismo, vírgenes cubanas y mexicanas, exvotos de Brasil y México, e incluso arte carcelario”, especifica Nury González sobre la selección de objetos que se podrán apreciar en esta exposición.
Así, representaciones del mundo popular en torno a la virgen, los santos, los pesebres, los crucifijos y los exvotos, entre otros, serán protagonistas de esta exposición que es resultado de un proyecto Fondart que permitió investigar la colección e incluso restaurar algunas de sus piezas. “Hay santos chilotes a los que se les restauró la vestimenta que, en muchos casos, era de seda. Entonces fue un trabajo también de investigación, de restauración y de registro fotográfico tanto del proceso como de las piezas ya restauradas”, añade la directora del MAPA.
La investigación
Representaciones de la devoción popular fue el nombre del proyecto Fondart en que se enmarca la muestra, investigación que les permitió constatar el valor patrimonial de la colección de religiosidad popular del MAPA. Se trata de piezas “que cuentan con más de 70 años de antigüedad, de artistas populares que en sus países de origen tienen el título de maestros artesanos, incluso premios nacionales de arte, como el caso del retablista ayacuchano Joaquín López Antay, cuya obra obtuvo hace un par de años el título de Patrimonio Cultural de la Nación, en Perú. Asimismo, de otros autores anónimos anclados a lógicas de representación que datan incluso del periodo colonial”, destaca Felipe Quijada sobre las piezas.
Si bien en un principio se podría suponer que los objetos exhibidos tienen un fuerte vínculo con el catolicismo, lo cierto es que en el transcurso de la investigación se pudo advertir que un número importante de éstos tenían “un significado divergente, propio del proceso de transformación de un imaginario, y que si bien en apariencia son deudoras de esta tradición (la católica), difieren radicalmente en cuanto a su uso y función con los de la ‘religión oficial’, acercándose a creencias locales de largo aliento, que revelan la heterogeneidad en la conformación cultural latinoamericana”.
De todo ello dará cuenta la muestra que se podrá visitar en la Sala MAPA-GAM, pero también la publicación que se desprende del proyecto y que reunirá el registro de estas piezas de gran valor histórico, material y simbólico. “Las piezas de la colección del MAPA expuestas constituyen una forma de ingresar en la historia no sólo chilena, sino que latinoamericana en su conjunto, desde los usos ancestrales de los objetos, las dinámicas coloniales de resignficación de referentes iconográficos, hasta su participación en dinámicas propias del contexto globalizado de nuestra actualidad”, agrega el encargado de documentación e investigación del museo.
Y es en reconocimiento a esa labor de rescate y salvaguarda del arte popular que desde hace más de 70 años ha venido realizando el MAPA a partir del trabajo realizado en torno a su colección que hoy supera las 7 mil piezas, que junto a la inauguración de esta muestra el 10 de abril, también se inaugurará una muestra permanente que pondrá a disposición del público parte de la historia del museo. Así, citas de Juvenal Hernández, Amanda Labarca, Tomás Lago y Pablo Neruda, compartirán espacio con documentos históricos, así como con los resultados de investigaciones más recientes, como la realizada en torno a las piezas de religiosidad popular de su colección.
“Éste es un patrimonio que ha salvaguardado la Universidad de Chile para el país, pero también es un museo vivo, en permanente reflexión, por eso estamos cruzando el pasado y el presente en esta nueva muestra”, explica al respecto Nury González. “Es decir, es el pasado el que nos ha permitido investigar, pero junto con recuperar esa historia, también hemos construido, con todo el equipo del MAPA, una historia reciente que ya tiene 10 años”, concluye la directora del museo.
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